Friday 23 March 2007

Bebidas

No se traspapeló la duda de la bebidas, mi joven
pupilo, pero es tan nimia que pensé que era una
agradable broma, pero ahí te va:
De las “bebidas” Chosto, todo es asunto de apreciación
y enfoque. Tu duda proviene por confundir la palabra
con un verbo cuando realmente es un sustantivo que
proviene de un adjetivo. Explico para los que ya no se
acuerdan de sus clases de español de la primaria:
Bebidas se transforma en un sustantivo (el nombre de
algo, en este caso de los líquidos preparados que se
deglutirán) si se confunden con el verbo (acción) de
beber, puede pensarse que están en un tiempo pasado
cuando aún no las bebemos.
Aunque Chosto, tu duda sigue estando sin fundamentos,
ya que aunque lo confundamos con un verbo no
forzosamente debe estar en pasado o acción realizada,
vemos:
Fueron BEBIDAS, están siendo BEBIDAS, serán BEBIDAS.
Ves como aún así la palabra podría aplicarse bajo
cualquier tiempo.
Espero no haberte confundido más.

Chismoso

Apreciable pupilo, utilicé ese término de manera
lúdica, únicamente para hacer alusión a nuestra rica y
extensa cultura popular.
Mira Chosto, la palabra chisme viene de latín Cemex
que quiere decir noticia verdadera o falsa, o
comentario con que generalmente se pretende indisponer
a unas personas con otras o se murmura de alguna.
Básicamente, chismear significa contar cosas de una
naturaleza personal, íntima, o sensacional. Incluye el
hecho de esparcir rumores que pueden hacer daño a
alguien, e incluye también el hecho de calumniar, es
decir, contar cosas escandalosas acerca de alguien.
Nótese que el chisme incluye no solamente contar
verdades acerca de alguien o esparcir rumores no
verificados acerca de alguien, sino incluye también
contar hechos poco verosímiles o mentiras de algo o
alguien, lo que causa profunda confusión entre nuestra
querida raza de cobre entre qué es un chisme y qué es
una mentira, causando la tan sonada frase ¡Ay, no seas
chismoso!
Ej 1: “Sí te fui a visitar, pero es que de camino me
encontré al Maussan y nos ractaron unos Ocnis” Re:
¡Ay, no seas chismoso!
Ej 2: “Fuimos al concierto de la Chakira y me estuvo
echando ojitos y coquetiando todo el conciero y por
eso se enojó la Lesly” Lesly: ¡Ay, no seas chismoso!
Y así podría seguír…
Saludos querido alumno.
PD: Es inaceptable que en el blog del Maestro aparezca
la plabara "pergúntale" sin acento.
Qué aberración.

Tongaína®

La Tongaína® apreciable Ganga, no es mas que una
suerte ejecutada en tres tiempos que se realiza en el
primer tercio de la faena y es considerada una de las
más complicadas suertes con capote. Su chiste radica
en que contrario a lo que muchos creen ¡Se hace sin
capote! Aquí es donde entra la magia:
La suerte está emparentada con otras mañas
carnavalescas como el “dominio de limón” y todas las
emparentadas con la ardilla voladora.
La tarde de toros tiene que ser calurosa y húmeda,
durante el ritual de vestimenta se consigue pintura
vinílica color carmín y se procede a pintar con
cuidado la cara frontal de la bolsa escrotal del
matador. Acto seguido el matador se calza las medias y
el pantaloncillo del traje de luces y parte hacia la
plaza.
Durante las suertes del capote, el matador deja en el
burladero el mismo y se dirige a encarar al toro de
frente a mano limpia (causando el asombro del
respetable por la gallardía del matador pues el toro
aún no está cansado).
El torero cita con la pelvis al toro y se le deja ir
corriendo de frente ante el arranque intempestivo del
astado, cuando están frente a frente el matador
recorta al animal e intencionalmente deja que un pitón
haga un corte a la altura de la ingle de sus medias
para así dejar al aire libre un amplio, hermoso y
volátil capote (que el público no sabe que es la bolsa
escrotal) quedándose el matador dando vueltas sobre su
eje floreando y luciendo tan bella obra de arte (el
público queda sorprendido por la magia pues piensa que
apareció de la nada un bello capote rojo por frente y
amarillento por detrás).
Esa es la famosa Tongaína® Ganga, pero deja te explico
que pasó esa tarde de la que inteligentemente haces
burla de manera sarcástica y que a Javier le da tanta
riZa (con z, vaya animal).
Esa tarde era más bien noche, hacía muchísimo frío y
sólo encontré grava roja y no pintura vinílica. Al
citar al toro y dejádmele ir de frente (con huevos,
esos no se quitan nunca) el toro rajó mi pantalón
dejando NADA al descubierto por el propio frío,
haciendo que el toro me embistiera en repetidas
ocasiones ante el asombro, risa nerviosa y
preocupación de mis alumnos.
Lo que me queda de consuelo es que hasta la fecha la
anécdota se recuerda no por el oso del profe, SIMO
como aquella tarde que el tutor nos enseñó lo que es
tener huevos y por lo tanto con él no se juega.
Amen.

Chicuelina

Estimado Chucho, puedes llamarme gurú aunque mis
títulos nobiliarios adornarían más mis conocimientos.
Gracias por preguntar sobre una de mis grandes
pasiones, me diste en la sangre.
Como bien mencionas Jesús, después de la verónica, la
chicuelina es el lance que más ejecutan en la
actualidad matadores y novilleros, por su vistosidad y
gracia.
Esta suerte se realiza citando de frente al toro, con
los brazos abiertos y semi-extendidos hacia adelante.
El cite debe hacerse a una distancia que permita al
diestro, cuando el toro se arranque, marcarle la
salida hacia cualquiera de los lados, con un
movimiento simultáneo de brazos y muñecas. Cuando el
toro va pasando cerca del cuerpo del torero, éste
simultáneamente gira media vuelta en sentido
contrario; gracias a este movimiento, su cuerpo queda
envuelto en el capote.
Pero por qué se llama así: Sencillo, así concibió este
lance el pinturero torero sevillano Manuel Jiménez
"Chicuelo", con la salvedad de que éste toreaba con
los brazos muy arriba, y en la actualidad se hace con
las manos bajas, e iniciando el giro cuando
prácticamente ha pasado en su totalidad el toro.
Para darle mayor profundidad a este lance, algunos
toreros llevan al burel hacia su espalda, con la misma
mano que le marca la salida, retrasando así hasta el
último momento el giro que se da en sentido contrario
al viaje del burel, mientras que con la otra mano
"jalan" el capote para estar en posibilidad de repetir
este lance por el lado contrario.
Ejemplos de esta manera de torear son Silverio Pérez,
y José María Manzanares. Mención aparte merecen las
chicuelinas de Paco Camino y Manolo Martínez, quienes
para darle mayor lentitud a este lance, dejaban "casi
muerto" el capote, y retrasaban el giro del cuerpo
cuando el toro casi ya había pasado.
Los tres tiempos de la Chicuelita son: La iniciación,
cargar la suerte y despidiendo al toro.
Pero Chicho, como las cosas no pueden ser siempre tan
sencillas te dejo la verdadera historia de la
chicuelina como conclusión: se dice que la inventó
Manuel Jiménez Moreno "Chicuelo" (1919-1951); de este
apodo viene precisamente el nombre de "chicuelina".
Manuel Jiménez la ejecutó por primera vez en Valencia,
España, el 9 de abril de 1922. Sin embargo, su
verdadero origen lo tiene en el toreo bufo (el
equivalente al futból llanero y es un toreo de
espectáculo, poco serio, que solía darse en verbenas
populares ) y su inventor fue Rafael Dutrús
"Llapisera". Chicuelo sólo la llevó al toreo serio.
Por último Chucho, sorprende que en tu pregunta dices
que es la segund suerte mpas usada actualmente y eso
es cierto, pero taurinamente está mal, pero hay tanto
villamelón que las aplaude que abusan de ellas. Y es
que veamos; La Chicuelina surge como un quite y los
quites son las suertes para quitar al picador del toro
si este cae del caballo. Actualmente con los petos es
raro que se produzcan caídas al descubierto, pero
antes el picador caía descubierto del lado del toro,
el matador debía entrar valerosamente al quite y salír
hacia atrás embrocado con el toro. El matador
peligraba, pero el picador se había salvado (un
verdadero heroe, no que ahora quien hace eso son las
cuadrillas del matador y los mismos equipios de
picadores). Ésta era la grandeza del quite, que solía
concluir con chicuelinas para adornar la valentía del
torero.
Actualmete la también llamada suerte a la navarra,
modernizada por Chicuelo, es una suerte de adorno que
hacen todos, con más o menos gracia, con más o menos
oportunidad y con más o menos abuso.
Siempre tuyo, tu gurú Tongay.

Tom Collins

Esta bebida Chicho, que por cierto me gusta mucho
degustarla en una tarde veraniega en compañía del
Quijote, es una combinación de ginebra, soda, azúcar y
limón creada hace más de cien años por un famoso
barman de nomre John Collins. El nombre “Tom” viene
por el nombre de la marca de ginebra que utilizó
llamada “Old Tom” (una ginebra dulzona y la más
popular a principios del siglo pasado). De la mezcla
del barman Collins y la ginebra Tom surgió el nombre
de este fabuloso cóctel ideal para embriagar a las
damitas. En la actualidad el término Collins se ha
expandido a muchas ramas de la coctelería y las
bebidas, por ejemplo sirve para englobar en una
familia a todos los cocteles que utilicen aguardiente,
jugo de limón, soda y azúcar. Y el nombre cambia según
el fuerte: con whisky (John Collins), con bourbon
(Jack Collins), con ron (Pedro Collins), con tequila
(Juan Collins) y un largo etcétera. Además el nombre
Collins se utiliza también en muchas partes del mundo
para denominar a los vasos de tubo (high ball o
jaiból) ya que esta bebida, considerada el padre de
muchos cocteles se prepara directamente en el vaso.
Tu pregunta me ha abierto el apetito.
Salud!!

Wednesday 21 March 2007

El Avalancha®.

Querido y apreciado Chosto, tantos momentos de
diversión no podían quedar en el olvido de este blog,
por lo que me gustaría contarte una historia, abre tu
mente y remontémonos en el tiempo:
Hierro-Mex fue el nombre que Don Jesús Pérez Lango dio
a su negocio cuando empezó a trabajar, a finales de
los 30's. En esos tiempos, se hacían diversos
productos de metal, como casetas, botes de basura,
postes, y principalmente, cortinas de acero. El gran
número de construcciones hechas durante los 40's,
dieron la oportunidad para que la Empresa se
consolidara y creciera, al requerir muchas de ellas de
cortinas de acero, como los mercados públicos y
tiendas comerciales. Durante esta época, Hierro-Mex
hizo las taquillas del viejo zoológico de Chapultepec,
entre muchas otras cosas.
En 1965, dos hijos de Don Jesús, Enrique y Antonio;
pidieron ayuda a su padre para fabricar un pequeño
carro con ruedas; inspirados en los carritos con
ruedas de baleros. Una vez que el primer modelo estuvo
listo, Don Jesús pensó que el carrito podía ser
fabricado para venderse, y desarrolló una nueva
versión mejorada.
Bajo el nombre de "Super Móvil Avalancha", salió a la
venta por primera vez en la temporada navideña de
1965. Al año siguiente, este carro deslizador redujo
su nombre por el que ahora es reconocido como un
clásico: Avalancha®.
Pero Chosto, respondiendo tu pregunta ¿por qué Don
Jesús decidió ponerle este nombre a su carro
deslizador? Bueno, la respuesta es simple: tenía que
encontrar un nombre mercadológicamente atractivo y que
a su vez hiciera alusión al producto, y vaya que lo
encontró. Si vemos el diccionario de la Real academia,
a la cuál pertenezco, dice que avalancha es sinónimo
de alúd y que este es una masa grande de una materia
que se desprende por una vertiente, precipitándose por
ella. Misma forma en la que funcionan estos carritos.
Al ser el primer producto comercial de este tipo, se
tuvo que buscar un nombre genérico que designara esta
innovación en el mercado; para preservar la marca
Avalancha® de uso exclusivo de Hierro-Mex.
Eventualmente el nombre genérico adoptado fue "Carro
deslizador".
Durante los primeros cinco años, el Avalancha conservó
su diseño original, y poco a poco se fue consolidando
en el gusto del público. A medida que el producto
alcanzó mayor demanda, se fueron haciendo varias
ligeras modificaciones, con el fin de lograr un mayor
gusto del consumidor. Durante toda la década de los
70's, el diseño del decorado del Avalancha® permaneció
relativamente estable, hasta que a principios de los
80's, se buscó dar un aspecto más actual. A principios
de los 90's, se hicieron otros cambios en el
Avalancha®: Se hizo un nuevo diseño en la cubierta, se
pusieron llantas anchas y se incluyó un banderín de
precaución. A pesar de ser una buena idea, el banderín
recibió poca aceptación y fue descontinuado. En esa
misma época, se intentó un modelo que recordaba un
poco al diseño original, pero con un tapete en la
parte posterior, que permitía que el Avalancha®
acomodara dos tripulantes. Tampoco tuvo demanda y fue
descontinuado en 1996. El diseño actual del Avalancha®
presenta varias novedades y sigue evolucionando
constantemente. Con la nueva versión del freno de pié
salida al mercado en 1997, se busca mantener el
juguete en el gusto de los niños, después de más de 35
años de conservar el liderazgo en el mercado.
Pienso por lo tanto Agus, qué en vez de estar
diseñando tantas cosas inútiles para BMW, les
compartas a los alemanes un poco de nuestra
tecnología, en una de esas el nuevo sistema de frenado
del Mini, es mediante una palanca que haga presión
contra el suelo y las llantas.

Pez pecigaña o Pipis y gañas

Estimado Chucho:
Cuando Voltaire dijo ningún libro, por voluminoso que
sea, instruye tanto como el teatro se olvidó de la
primera y más efectiva forma de aprendizaje del
hombre: el juego. En la Nueva España las festividades
religiosas y civiles fueron los motivos principales
para la fabricación de juguetes: muñecos de madera,
muñecas con vestidos de tela y trapo, trompos, espadas
de cartón, máscaras, piñatas, matracas y soldados.
También existían las rimas cantadas, como la Rueda de
san Miguel, que data del siglo XVI, o el objeto de
estudio de hoy: el Pipis y gañas.
¿Pero acaso sabemos que es el pipis y gañas? Realmente
no por que ha tenido una serie de deformaciones a
través de la historia.
A inicios del siglo XVIII los niños novohispanos
jugaban con sus hermanos mientras sus madres se
dedicaban a labores cotidianas, como la costura o la
música. Y para matar el tiempo jugaban al juego
interminable de las rimas cantadas conocido en esa
época como Pez pecigaña (sí Chicho, el nombre desvarió
tanto hasta conocerse como Pipis y Gañas así como
desvarió también la canción).
Las canciones y rimas tradicionales infantiles, muchas
veces, encierran bajo su aparente sinsentido
significados ocultos que se refieren a nuestros más
ancestrales y universales comportamientos. Se han
resguardado, tras siglos y siglos, en la expresión
esencialmente emotiva, lúdica y musical de los niños y
desde aquí pueden evocar, para nuestra comprensión
adulta, preguntas y respuestas que la prisa de la
modernidad nos ha enseñado a esquivar.
El Pez pecigaña que mutó a Pipirigaña y en América a
Pipis y Gañas, con más o menos variaciones trata de
una cancioncilla que dice: Pipirigaña / mata la araña
/ un cochinito / bien peladito / ¿Quién lo peló? / La
pícara vieja / que está en el rincón. Tanto en España
como en Latinoamérica, la rima se aplica a un juego
simple, consistente en dar pellizcos en las manos
apoyadas del otro, que trata de esconderlas al ser
tocadas (muy similar a las manitas calientes pero sin
violencia, pues los pellizcos son simples caricias).
Don Pablos, el Buscón, fue de los primeros en
testimoniar el entretenimiento, según cuenta Quevedo,
y desde allí millones de niños lo han hecho, adecuando
el nombre del personaje a su castellano, catalán,
gallego o euskera materno.
Pipirigaña, Pipis y Gañas o Pez Pecigaña parece, de
este modo, referirse a un icono infantil esencialmente
carnavalesco, representado por ejemplo en los cuadros
de Peter Brueguel, en los que el disfraz, la chanza,
la representación del mundo al revés, la animalización
de los humanos, el regocijo por trastocar el orden… se
ubican de pleno derecho entre esos niños del siglo XVI
que el viejo pintor ha eternizado.
Pipirigaña es, entonces, una figura de comparsa
carnavalesca emparentada con otros peces festivos,
como la sardina y su entierro burlesco el Miércoles de
Ceniza. Al hilo de esta clave, la hazaña que se le
atribuye, matar una araña, puede identificarse con la
burla secular de ridiculizar grandes empresas
caballerescas mediante su inserción en el ámbito de lo
nimio y lo cotidiano (como ejemplo queda también el
sastrecillo valiente), y algo semejante puede pensarse
del cochinito bien peladito, figura de antiguas
procesiones burlescas al que los niños desenmascaraban
despojándole de su cabellera. La vieja que cierra los
versos, agazapada y presuntamente malhumorada desde su
negro rincón, luctuosa en contraste con el regocijo
del disfraz del Pez Pecigaña, no puede ser otra que
Doña Cuaresma.
Finalmente Chucho podemos encontrar entonces en el
Pipis y Gañas una gran transgresión carnavalesca, una
ida en contra de la cuaresma y la vigilia y un hambre
por el exceso antes de entrar a las recatadas normas
religiosas. Por lo que podemos ver que al nuestras
abuelas enseñar el Pipis y Gañas a nuestras madres
estaban, inconcientemente, dándoles todo u ritual
pagano en contra de la cuaresma.
Desafortunadamente la televisión acabó con todos estos
juegos y actualmente no hay nada, no electrónico, que
se le compare. Por lo que los exhorto a que revivan
esta cuaresma esta tradición que parece exigir el
primor infantil del disparate, pero que quizás sea el
único y primordial sentido de la antesala del ayuno,
un sentido que, a fuerza de comercio y olvido, estamos
a punto de ocultar del todo (léase sección del Tongay
sobre la Vigilia).
Nota de Pie: Actualmente la canción tiene tantas
variaciones que encontaran letras sin sentido como: A
qué jugaremos/ al pipis y gañas/ es el juego de la
mano cortada/ quién la cortó / el rey o la reyna… o en
vez de la parte de “un cochinito bien peladito”
encontrarán “con un cuchillito bien afiladito”.